La importancia de la investigación de datos en la era digital

En la era digital, los datos se han convertido en el eje central de la estrategia empresarial, especialmente en sectores como el de las licitaciones públicas. Sin embargo, el verdadero desafío no es solo tener acceso a información, sino saber cómo utilizarla estratégicamente para diferenciarse en un entorno altamente competitivo. En esta entrevista, hablamos con Marina Bernaldo, responsable del departamento de investigación de Doubletrade, quien nos explica por qué contar con un equipo especializado en este ámbito puede ser la clave del éxito en un mercado donde cada detalle cuenta.

Hoy en día, se habla mucho sobre el valor de los datos en las empresas, especialmente en sectores como el de las licitaciones públicas. ¿Qué tan importante es contar con un departamento de investigación de datos en este contexto?

En el mundo actual, los datos son fundamentales. La tecnología nos ha permitido tener acceso a una cantidad inmensa de información en abierto: bases de datos públicas, informes sectoriales, estadísticas… Todo está al alcance de la mano. Sin embargo, la clave no está solo en tener esos datos, sino en saber cómo usarlos estratégicamente. Por eso, contar con un departamento de investigación de datos es crucial para cualquier empresa que quiera diferenciarse, especialmente en sectores como el de las licitaciones públicas, donde la competencia es feroz.

Entonces, ¿dirías que todos tienen acceso a los mismos datos?

Exactamente. En las licitaciones públicas, por ejemplo, la información que maneja una empresa es, en gran medida, la misma que puede consultar su competencia. Los pliegos, los requisitos de las convocatorias, las adjudicaciones… Todo está en abierto a través de plataformas como el Portal de Contratación del Sector Público. Pero si todos tienen acceso a la misma información, ¿cómo te diferencias? Aquí es donde entra la capacidad de ir más allá de los datos públicos.

 ¿Y qué pasa con los datos que no están en abierto? ¿Hay información que sea más difícil de obtener pero que pueda marcar la diferencia?

Sin duda. No toda la información relevante para ganar una licitación está en abierto. Hay datos más estratégicos, más difíciles de obtener, que realmente pueden inclinar la balanza. Por ejemplo, conocer patrones de adjudicación,o estar al tanto de tendencias de mercado internas. Estos son los datos que no todos pueden ver, y contar con un equipo de investigación de datos te permite detectarlos y sacarles provecho. Esta es, en mi opinión, la verdadera ventaja competitiva hoy en día.

¿Podrías darnos un ejemplo concreto de cómo este tipo de información puede ayudar en el sector de las licitaciones públicas?

Claro. Un buen ejemplo sería analizar los contratos adjudicados por una entidad pública en los últimos años. Un departamento de investigación de datos puede detectar patrones: qué tipo de empresas ganan con más frecuencia, qué características suelen tener sus ofertas, e incluso los precios más competitivos. Con esta información, una empresa puede ajustar su oferta para ser más competitiva. Y no solo eso, también puede anticipar oportunidades futuras que otras empresas quizás pasen por alto. 

Mencionabas el uso de tecnología avanzada para manejar toda esta información. ¿Cómo influye la tecnología en este proceso?

La tecnología es fundamental. Gracias a herramientas de inteligencia artificial y análisis predictivo, es posible procesar grandes volúmenes de datos rápidamente y con mayor precisión. Por ejemplo, los algoritmos pueden detectar tendencias y oportunidades que, a simple vista, pasarían desapercibidas. Esto no solo acelera el proceso, sino que permite tomar decisiones mucho más informadas. En el contexto de las licitaciones públicas, donde cada detalle cuenta, contar con esta capacidad de análisis avanzado puede marcar la diferencia entre ganar o perder un contrato.

Entonces, ¿por qué es tan crucial un departamento de investigación de datos hoy en día?

En resumen, la diferencia real no está solo en tener acceso a los datos en abierto, porque todos los competidores los tienen. La diferencia la marca la capacidad de ir más allá, de detectar esos datos ocultos o estratégicos que no son visibles para todos. Un buen departamento de investigación de datos no solo analiza la información pública, sino que identifica patrones, anticipa cambios y oportunidades, y detecta esos detalles que pueden marcar la diferencia al momento de licitar. En sectores como el de las licitaciones públicas, donde el margen de éxito es pequeño, tener acceso a esta información es lo que separa a los ganadores del resto.